La visita empezó en el majestuoso monumento de la Mezquita-Catedral. Luego seguimos el paseo por la rivera del Guadalquivir explicando las construcciones que componen la imagen más reconocida de Córdoba: La puerta del puente, el puente romano y el triunfo de S. Rafael. Para conocer la evolución de la ciudad, tomamos como siguiente parada el Arco del Portillo, el cual ha sido testigo de como las diferentes culturas romana, árabe y cristiana han ido haciendo de nuestra ciudad lo que hoy en día conocemos. Seguimos por la plaza de Jerónimo Páez,para enseñar a nuestros amigos sevillanos el ambiente y encanto del urbanismo cordobés.
La siguiente parada fue la Iglesia de la Victoria, una de las pocas iglesias neoclásicas con la que contamos. Para mostrar el aspecto moderno de nuestra ciudad hemos incluido en nuestra ruta la Plaza de las Tendillas que contrastaba con la siguiente parada: el Templo romano de Claudio Macerlo, referente de los orígenes romanos de nuestra ciudad.
La visita la hemos finalizado con una costumbre general de los cordobeses: tomando una caña en la emblemática plaza de la Corredera que constituye el punto de encuentro de todos los habitantes.
La experiencia nos ha resultado muy enriquecedora y creo que hemos conseguido los principales objetivos de esta iniciativa: transmitir la esencia del Patrimonio cultural de nuestra ciudad, y pasarlo bien haciéndolo.
Nieves Guillén Varo 2ºGSGIAT
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